Descubrí la tienda on line de RobynGoods.com por casualidad. Me hablaron de ella unas amigas muy puestas en las novedades solidarias en la red, porque colaboran con diversas causas sociales, humanitarias o medioambientales. Esa tarde, mientras tomábamos un café, salió el tema de cómo la publicidad nos bombardea para continuar sobrealimentando a las megamultinacionales. Que solo nos ponen ganchos para atraparnos en las cuentas atrás, ofertas, etc. Les dimos un buen repaso a todopoderosos del planeta: Bill Gates, Elon Musk o Jeff Bezo. También recibió un toque el producto nacional: Amancio Ortega. ¿Qué hacen estos magnates con tanto dinero, además de ser portada del “Forbes”? Un poco de sorna, aunque sea un asunto que despierta sensibilidades. Hablamos de fortunas de miles y miles de millones de dólares. Un sinsentido.
El controvertido tema dio para mucho. ¿Es el sistema el que nos conduce a un consumo voraz? Todo se basa en tener. Poseer. Acumular. La moda y la tecnología, entre las industrias más adictivas y contaminantes del planeta. En la sociedad de consumo, el concepto de novedad tiene una caducidad ínfima. Lo nuevo hoy, mañana es viejo. Pese a la situación social y económica, y los tiempos que se avecinan, estos gigantes empresariales multiplican meteóricamente su cuenta de ingresos pese al contexto de crisis, que parece no afectarles. Sin ánimo de bromear, ¿la filantropía corporativa pa’cuando? No se trata de que las compañías hagan campañas puntuales, o sea algo para salvar el expediente ante la sociedad, ¡y listo! Esas de tirón mediático. Llamativos titulares, porque la solidaridad está moda. Puro esnobismo empresarial.
No obstante, la brecha social nos separa aún más. Ricos muy ricos. Pobres muy pobres. No cabe duda que a todos los niveles el asunto requiere cambios profundos. Una transformación de base, que además genere efecto dominó ¿Por dónde empezar? En primer término, las compañías tendrían que incorporar en su arquitectura empresarial: la filosofía corporativa. La solidaridad en ADN. Todos debemos arrimar el hombro, y las grandes fortunas deberían ser las que den ejemplo. El discurso es reorientar el consumo o la forma en la que lo hacemos. Hay que generar fórmulas diferentes, propuestas arriesgadas, innovadoras y disruptivas. Es poner en marcha un concepto para el cual ni existe nombre: donación con compra. ¿Te suena? Podríamos lanzar un reto, encontrar un nuevo término a esta nueva fórmula. ¿Te atreverías?
Y ahí salió el nombre de RobynGoods. Buy&Be Goods. Un eSolidario donde comprando se donaba directamente. ¿Leyenda urbana o realidad? Había que comprobar de qué iba la iniciativa. ¿Cómo? Una empresa que cedía el 75 de su beneficio al usuario/a para que este/esta lo donase a su causa favorita? Había que investigar un poco. Primero, nos llamó la atención su nombre, con algunos cambios fonéticos, se asemejaba al del héroe de leyenda que ayudaba a los necesitados: Robin Hoods de los bosques. Buscamos en el móvil la tienda digital. Sin engañarnos, éramos algo escépticas.
¿Qué fue lo que encontramos? En primer lugar, RobynGoods es una tienda on line donde puedes comprar en internet y de compras offline. Ya se pueden poner las pilas los megalodones del océano virtual, ¡ojo! que muchos peces pequeños en el mar hacen sombra a los grandes. En la tienda tiene de todo un poco: hogar; electrónica&informática, fotografía, jardín, mascotas, juguetes, motos, herramientas&hobbies, deporte, moda, belleza, zona friki y productos solidarios, entre otras.
Calidad y precio de primer nivel. Plataforma cien por cien segura. Lo más flipante es el sistema de compra de la plataforma. Juega con muchos emoji (diana, el sombrero de Robin es el carrito, flechas, vamos hay muchos guiños al universo de Sherwood. Nos preguntamos: ¿dónde estaba la cámara oculta? ¿esto existe? ¿es posible? ¿si una empresa casi desconocida mantiene su rentabilidad empresarial así por qué no la imitan? Son el ejemplo de que la filantropía colaborativa sí funciona y de que si se quiere, se puede. Y eso que lo tiene difícil, porque las grandes le llevan mucha ventaja. Por eso, te contamos porque a partir de ahora RobynGoods deber ser tu tienda virtual favorita. Sin duda alguna, nosotras ya estamos convencidas.
Estos son las diez razones:
1. Garantizan alta calidad certificada a los mejores precios. Compra lo que ves sin sorpresas de última hora.
2. Aseguran la entrega de todos sus pedidos. Siempre llegan. Envíos seguros. Devolución gratuita.
3.Adquirir en sus plataformas de pago es 100% seguro. Sin riesgos para ti
4.Ofrecen atención 24/7 para cualquier consulta con nuestro Departamento de atención al público. Siempre te asesorarán nuestros comerciales.
5.Proponen un sistema de consumo online y offline innovador y disruptivo, basado en la colaboración y sostenibilidad.
6.¡Atención! Cuando compras siempre donas. Sin gastos extra para ti. Ceden el 75% de nuestro beneficio. Al adquirir cualquier artículo activas este mecanismo único.
7.Somos el primer eSolidario. Una nueva forma de adquirir. El desglose de precios y el reparto de los porcentajes beneficios es 100% transparente.
8.Las ong, esal, entidades, asociaciones o fundaciones, a quien donar la eliges tú. Depositan en ti la confianza. ¡Te lo ponen muy sencillo!
9.Son un canal nuevo para que éstas recauden fondos económicos, porque además pueden activar una tienda online a coste cero con beneficios plus.
1o¿Quieres ser su embajador/ra? Solo tienes que enviarles un vídeo original. ¿Preparado para vivir o sentir como un robynians?
RobynGoods es la muestra de que la red está llena de sorpresas. Los modelos de negocio en el ámbito digital son cada vez más creativos e innovadores y, sobre todo, buscan compartir el éxito empresarial con causas que lo necesitan. Esta plataforma on line nos demuestra que quizás los cambios no vengan de los gigantes, sino de empresas menos conocidas RobynGoods, que se van haciendo un hueco en el mundo digital y que marcan un comienzo.
Seguro que no se te olvida, la solidaridad tiene nombre de héroe, ¡RobynGoods!